El pensamiento de cada ser humano, es tan grande como diverso el del universo mismo. Desde que nacemos luchamos por ciertos objetivos, por tener una vida estable y dar a nuestros hijos un futuro importante. En ocasiones cuando las cosas no se nos dan como queremos nos volvemos tozudos, herméticos, y obstinados. Cada signo pasa por esta forma de ser, aunque algunos en menor intensidad que otros. Sin embargo, en el caso del primer signo del zodíaco las cosas cambian un poco. ¿Por qué los Aries son tan difíciles? Es la interrogante que despejaremos a continuación.
Su mundo interno
Para entender mejor a este signo, hablemos un poco de su mundo. Esta casa astral es controlada en gran manera por su elemento fuego. El cual es inestable, cambiante y al que nadie puede tomar con la mano y manipularlo a su antojo. Son regidos por el planeta Marte, el cual le da una mente inquieta y aventurera. En líneas generales son personas bondadosas y siempre concentradas a lo suyo. Son incapaces de hacer daño por gusto, solo odian a las personas cuando los intentan manipular con lágrimas o controlar su vida sacándo a relucir cosas del pasado.
Aries tiene un carácter sumamente fuerte, se enoja con muchísima facilidad. Pero también, vuelve a la calma más rápido que otros signos del zodíaco. Dan todo sin esperar nada a cambio. Son inocentes en gran medida, ayudando a los de su entorno si se les permite hacerlo. Por esa razón, muchas personas suelen aprovecharse de su noble corazón desatando graves consecuencias e ira sobre su forma de actuar.
¿Por qué los Aries son tan difíciles?
Lo incontrolable que se vuelven las persona de este signo, no es porque sean obstinadas o tozudas. Para la astrología, la casa de Aries está envuelta de energías tan altas que si no las drenan, ellos mismos entran en un estado mental de confusión. Que por lo general acaba en malas contestas y disputas con sus seres queridos en todo momento. Aun mas, cuando no hacen lo que desean o se les obliga a realizar ciertas actividades, se convierten en un volcán que tarde o temprano explotara. Es por ello, que lo mejor es dejarlos ser, a como ellos dictaminen.
En sus días buenos son personas que ayudan, aconsejan y suelen estar calladas. Cuando están enojados, suelen hacerse más fríos y difíciles de llevar. Cuando esto les sucede esperan el momento adecuado para insultar y descargar sus energías de odio. En el amor, los nacidos bajo esta casa astral en el público son poco expresivos y en privado están cargados de pasión y caricias, algo difícil de entenderlos, ya que no son tímidos en lo absoluto. Por algo son enérgicos, le gustan los retos y las grandes aventuras. En interior mantienen en todo momento una guerra, donde las ideas batallan entre sí, para que las ponga al corriente e iniciar nuevos proyectos.
